sábado, 15 de septiembre de 2012

La imagen: Carro de viga o par, llevado por vacas con melena.




No es un carro de Joarilla, pero como si lo fuese, porque así eran los que, hace ya muchos años, pasaban diariamente por calles y plazas del pueblo, camino de las diversas tareas agrícolas, en este caso se trataría de acarrear hierba o paja, a juzgar por el armazón de madera que lleva sobre los tableros del carro.
Las vacas, de color negro, van sujetas al yugo con la correa, y el yugo  bien atado a la viga. Bajo el yugo, y sobre sus cabezas, llevan vistosas melenas, con tiras de piel delante de su rostro, sobre todo de los ojos, para evitar que moscas y otros insectos las molesten. Y si no siguen bien por el camino, ahí están los ramales, cuyos extremos metidos en sus fosas nasales, permiten al conductor guiarlas debidamente. Además éste tiene a  su disposición la ijada, para picarlas, y así conseguir que continúen por el camino y no se detengan.
Sobre el carro va el agricultor. Es de suponer quien le acompaña sea su hijo, o el de algún familiar.  Los niños disfrutábamos mucho, por entonces, subiendo a los carros, a los trillos, o a cualquier otra máquina agrícola en la que pudiésemos hacerlo. Era una forma de viajar, aunque fuese solamente al campo, y ver dehesas, valles, tierras sembradas o en barbecho, viñas, encinas o chopos, y otras muchas cosas de las que ofrece la naturaleza.
A veces los ejes de los carros rechinaban, produciendo un ruido desagradable, cuando pasaban por la calles del pueblo, algunas llenas de barro o con muchas piedras. Y es que no estaban bien engrasados. Enseguida el agricultor los engrasaba para evitar su desgaste, y también el ruido.
La imagen nos acerca a una época sin coches, aunque, por lo que se ve, ya circulaba el Seat 600, que vemos aparcado detrás, y no lejos del carro. Sirve para recordarnos también los duros trabajos del agricultor en algunas épocas del año, sobre todo cuando había que preparar la tierra y sembrar, o cuando llegaba el verano y el otoño, y había que recoger la cosecha.
En la actualidad todo es distinto: aperos, maquinaria, costumbres, viajes, y forma de vivir y de trabajar. Pero, para los que no lo vivieron y conocieron, ahí están la imágenes, una de ellas  ésta del “Carro de viga o par, llevado por vacas con melena”. 
(La imagen procede de una exposición de fotografías antiguas celebrada en Quiruelas de Vidriales, un pueblo de los Valles de Benavente, en la provincia de Zamora)